EL SÍNDROME DEL ACENTO EXTRANJERO
El síndrome del acento extranjero es uno de los trastorno menos conocidos e investigados de la neurociencia. Afecta al área del lenguaje, en concreto al acento preservando la correcta articulación y fluidez del habla.
El síndrome del acento extranjero es uno de los grandes enigmas de la neurociencia en el área del lenguaje. A lo largo de la historia ha sido un síndrome poco común y poco investigado. En líneas generales, este trastorno se caracteriza por la adquisición de manera súbita de un acento diferente al de la lengua materna, en cambio, el lenguaje es fluido e inteligible. Normalmente, se da en personas con daños cerebrales adquiridos.
- Síntomas:
- El habla es reconocida por otras personas como distinta a la lengua materna, pero no se asocia a ninguna otra lengua en concreto.
- Puede acompañarse de manifestaciones de otros trastornos del habla como afasias y disartrias.
- Posibles causas:
Las investigaciones hasta el momento muestran la aparición del síndrome del acento extranjero después de diagnosticar una afasia de broca o afasia motora transcortical.
En términos generales, la ciencia asocia este síndrome con daños cerebrales en el hemisferio izquierdo, en áreas que participan en la automatización de las conductas motoras complejas.
En la actualidad, se investigan las zonas neuronales que regulan la articulación, la adquisición del habla nativa y de una segunda lengua, sin embargo no existe un acuerdo en la metodología a seguir para determinar las causas de este síndrome.
- Tratamiento:
Al igual que las causas, no hay mucha información sobre la intervención a seguir por los profesionales del lenguaje.
Algunas de las técnicas que se han investigado son:
- La retroalimentación auditiva y sensorial: se basa en escuchar sonidos de la propia voz cuando se habla para modificar algunas de sus características como la articulación o el acento.
- Enmascaramiento auditivo con ruido: en esta técnica mientras la persona habla tiene unos auriculares con ruido con el fin de enmascarar su voz. Esta técnica también es utilizada para otros trastornos como la disfemia.